Perspectivas para el T2 Gestión del riesgo y posicionamiento de cara al futuro

Los inversores necesitan abordar el problema de la inflación, en máximos de hace varias décadas. Dado que los bancos centrales dan prioridad a las subidas de tipos, los sectores de valor deberían superar a los de crecimiento, mientras que los préstamos sénior estadounidenses ofrecen rendimientos atractivos.

Las subidas de tipos, la inflación y la volatilidad también requieren diversidad, exposición a inversiones alternativas y un énfasis en los mercados privados, los bienes inmobiliarios directos y los activos reales.

Las incertidumbres del mercado están generando una volatilidad considerable. Dado que la volatilidad se mantendrá en niveles elevados a corto plazo, los inversores pueden reducir los riesgos a largo plazo para su patrimonio mediante el establecimiento de estrategias de liquidez e inversiones estructuradas.

Los enfoques dinámicos de asignación de activos también son una forma eficaz de gestionar los riesgos de caídas al tiempo que se mantienen las inversiones. La volatilidad del mercado derivada de las incertidumbres actuales puede generar puntos de entrada interesantes a largo plazo.

Abogamos por los títulos que han sufrido grandes caídas, pero con sólidos fundamentales y un potencial de crecimiento positivo a largo plazo, como aquellos en las temáticas del 5G, la automatización y la robótica y la movilidad inteligente.

La invasión de Ucrania por parte de Rusia probablemente marcará el inicio de una era de seguridad en la que los Gobiernos y las empresas priorizarán la seguridad y la estabilidad sobre la eficiencia y los precios. Por ende, los inversores harían bien en adoptar posiciones en seguridad energética, seguridad alimentaria y ciberseguridad.